viernes, 25 de septiembre de 2009

la cosina como desarrollo nacional


Economía de escala.
“UN PAÍS SIN CULINARIA NO ES PAÍS”, DIJO EL POETA FELIPE MEJÍA, EN LOS AÑOS VEINTE. DESDE ENTONCES, LA GASTRONOMÍA SE HA FORTALECIDO A TAL PUNTO QUE ES UNO DE LOS SECTORES MÁS DINÁMICOS DEL PERÚ

Por: Luis Felipe Gamarra

La gastronomía podría representar el primer consenso al que hemos llegado desde la independencia de España. En los últimos años, los peruanos, sin importar la billetera, la raza o la geografía, nos hemos sentado alrededor de un mismo anticucho para rezar de manera uniforme ese vocablo onomatopéyico que se ha transformado en un himno al orgullo patrio: “¡umm!”.

En el Perú precolombino ya existían hombres que habían aprendido a domesticar el calor de una fogata a la hora de preparar los alimentos en ollas de cerámica. Ellos amansaron la roca, dándole una forma cóncava para moler el maíz, el chuño, la quinua y el ají. Más tarde, aquel instrumento se llamó batán, que ejercía sobre los granos el mismo principio que el mercurio en la plata de baja ley: les revelaba el alma.

Desde entonces, la sabiduría de estos peruanos se ha divulgado desde los hogares más humildes hasta las cocinas más exclusivas. Hace una década, ¿quién podría imaginarse que rescatar el pasado gastronómico del país, hasta convertirlo en una propuesta más sofisticada, iba a terminar implementando una cadena de valor que representaría el 4,2% del PBI?

Según el estudio Dimensiones del aporte económico y social de la gastronomía en el Perú, elaborado por Enrique Bernal, de la consultora Arellano Marketing, para la Sociedad Peruana de Gastronomía (Apega), los restaurantes movilizarán S/.12.350 millones durante el 2009, entre inversiones en infraestructura, compra de insumos, pagos a su personal y valor agregado. Una cadena productiva que va desde la chacra hasta los productos manufacturados y que involucra a sectores como agricultura, textiles, pesca, transporte y metalmecánica. Así, esta cifra sería casi la producción total agrícola del 2008.

Según el mismo informe, si sumamos el monto que se generará alrededor del consumo de alimentos en hogares, que alcanzaría los S/.29.512 millones para el mismo período, podríamos afirmar que la cocina movilizaría más de S/.40 mil millones a fines del 2009 (11,2% del PBI estimado para este año).

Si queremos medir el impacto en un contexto más próximo, sería como si para antes de terminar el año se destinaran fondos para construir 135 hoteles como el Westin Libertador (US$100 millones), el edificio más alto que tendrá el Perú. Así de brutal.

Para Gastón Acurio, presidente de la Apega, y protagonista de este crecimiento, la cocina podría convertirse en el motor de borda de la economía, si se asume el reto de elevar los estándares de calidad en la base de la pirámide, superar desventajas como la baja formalidad del sector y la falta de cultura empresarial en el agricultor que, según Acurio, podría transformarse en exportador: “La gastronomía exporta US$1.500 millones, pero en una o dos décadas podríamos exportar los US$150 mil millones de Japón”.

¿El Midas de la gastronomía podrá inspirar al incrédulo hombre del campo, cuyo sacrificio nunca ha estado debidamente recompensado? Según Víctor Torres, asesor de la Convención Nacional del Agro Peruano (Conveagro), a la que pertenecen 32 gremios agropecuarios, los campesinos se sumarán prontamente a la filosofía de Acurio: “Si la gastronomía crece, nosotros creceremos. No existe cocina peruana sin industria agropecuaria. Es hora de que la mentalidad del campo cambie. Será un proceso largo, pero hay que empezarlo”, asegura Torres.

Conveagro está por firmar un convenio con la Apega para que se difundan en el campo valores como calidad, productividad y asociatividad, para contribuir de manera más eficiente a la cadena gastronómica: “un campesino gana el 15% del precio final de un 1 kilo de papa. Su ganancia se la llevan los intermediarios. Vamos a hacer una alianza con los chefs de la Apega para acercar al agricultor con el gerente del restaurante”, afirma Torres.

Si complementamos la oferta gastronómica con el pisco, el licor de bandera, como hacen las cocinas de México, Italia, Francia, Argentina y España con sus respectivos vinos y aguardientes, estaríamos sumando a la cadena la labor que se desarrolla en 36 valles costeros: “se podría hacer un portafolio de productos complementarios de las mismas uvas (vinos, vinagres, aceites, esencias) y otros productos agrícolas (aceite de oliva, miel de abeja), incluyendo el turismo enológico de alto nivel”, señala José Moquillaza, ex director ejecutivo del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Pisco.

Si hablamos de crecimiento, vale la pena reseñar la rapidez con la que han crecido otros sectores que han desarrollado productos alrededor de la cocina, como la banca. Ignacio Quintanilla, gerente general adjunto del BBVA Banco Continental, explica que en solo tres meses, el préstamo gastronómico (para los que buscan abrir un restaurante o afín), ha alcanzado los S/.35 millones en colocaciones. En ese mismo lapso, el préstamo de estudios gastronómicos (para posgrados en cocina), ha superado los S/.12 millones en colocaciones.

MOTOR DE TURISMO
Como la banca, el Perú podría desarrollar productos turísticos más especializados, como visitas a bodegas pisqueras, que pondrían al país en la mira de un turismo más exclusivo. Existen agencias de viajes como Lima Tours y Magical Cusco que trabajan con paquetes para personas que visitan el Perú solamente por sus atributos culinarios, en los que el turista descubre el país a través de su cocina. Según el perfil del turista 2008, elaborado por Prom-Perú, la gastronomía ocupa el quinto lugar de una lista de 30 atributos por los que el turista visita el Perú.

Las cifras del estudio de Arellano indican que en el 2008 el turista consumió en el Perú alimentos por un valor de US$431 millones.

Por otro lado, el turismo gastronómico representa el 5% del turismo nacional. Las divisas obtenidas por este rubro habrían alcanzado los US$120 millones el 2008, según estimados de Arellano, en base a información de la Cámara de Comercio de Lima.

Sin embargo, existen retos que aún se deben superar para crecer más.

CASI UNA CARNICERÍA
Según Carlos Heeren, socio de Apoyo Consultoría, el sector es sumamente competitivo. Por el lado de la oferta, existen decenas de cocineros que egresan todos los años y necesitan trabajo. Por el lado de la demanda, somos un país que interactúa alrededor de la comida, que demanda productos cada vez más innovadores. “Hoy, en el Perú, los cocineros comparten sus recetas (o las publican) y la ventaja competitiva nadie cree que la pueda sostener por saber la cantidad exacta de un ingrediente en una comida. Una ejecución impecable es lo que se necesita, sencillamente, para seguir en el negocio”, afirma.

En ese sentido, Carlos León Velarde, gerente general de China Wok, la franquicia más exitosa del Perú en el extranjero, señala que en un futuro próximo, la industria competirá por el favor del consumidor en base al servicio, más que a la cocina. “El peruano ha formado su paladar en casa, desde pequeño, y se ha sofisticado, fruto de una oferta más especializada. Pero llega un momento en que el mercado crece y alcanza un nivel de calidad estándar. Allí debes esforzarte más por la atención”.

A pesar de que la cocina a gas ha reemplazado al carbón y la picadora eléctrica al batán, el paladar peruano se ha mantenido intacto: exigente, intolerante y sibarita. El Perú, bendecido por un mar generoso, un clima templado, y distintos pisos ecológicos, ha cultivado una cocina particular en los 24 departamentos del país y debería aprovechar la oportunidad que se le presenta para reflejar en el mundo la mixtura de la que estamos hechos los peruanos.

Dependerá no solo de los pioneros de la Apega, sino de todos, para que la cocina se transforme en quizá la única ventaja competitiva con valor agregado que hemos desarrollado en toda nuestra historia.

EL AJÍ
Un embajador de la cocina
Para la oficina de inteligencia comercial de Prom-Perú, el ají amarillo será el próximo protagonista de las ferias gastronómicas de la marca “Perú, mucho gusto” en el extranjero. De acuerdo con William Arteaga, gerente del sector de agro y agroindustria, se está trabajando con la Apega la promoción de las exportaciones de ají amarillo, cuyas ventas al exterior, con los jalapeños y rocotos, han registrado un monto de US$36,3 millones durante el año pasado.


comentario
Gracias a la iniciativa tomada por Gastón Acurio se ha podido llevar nuestros suculentos platos a diversos lugares del extranjero, con lo cual el nombre del Perú también es conocido ya no solo por sus ruinas arqueológicas como Macchu Picchu, sino también por sus diversos sabores
Es increíble ver que la gastronomía se haya convertido en uno de nuestros grandes ingresos a pesar de ser un producto no tradicional, porque todos pensamos que los únicos que generaban grandes ingresos eran la exportación de minerales (oro, plata ,cobre,etc); a todo esto nos lleva que el estado debería de incentivar y apoyar a aquellos productos que tienen alto valor agregado. Pongo como ejemplo la lana, en vez de exportar lana en bruto deberíamos de exportar chompas ya que estas tienen un mayor costo en el exterior, y al hacer esto estaríamos generando empleo a aquellas personas de la sierra, personas expertas en tejido por tradición
Pues también no cabe duda que el ají amarillo es otro de nuestros productos más pedidos en el exterior el cual registra al igual que la gastronomía grandes ingresos, pero se imaginan cuanto más registraría si exportamos ají amario como salsa?...

viernes, 11 de septiembre de 2009


INFORME :
¿Aeropuerto en Pisco a la vista?
El nuevo eje del sur.

LA POSIBILIDAD DE UN AEROPUERTO EN PISCO PODRÍA IMPULSAR EL TURISMO Y LA AGROINDUSTRIA DEL SUR DEL PAÍS, CON MIRAS A CONVERTIRSE EN UNA SEGUNDA PUERTA DE INGRESO AL PERÚ, ADEMÁS DEL TERMINAL JORGE CHÁVEZ EN LIMA

Por: Luis Felipe Gamarra
Podría parecer una broma de mal gusto hablar sobre la construcción de un aeropuerto internacional en Pisco, a 220 kilómetros de Lima, porque desde la noche del 15 de agosto del 2007, poco más de dos años atrás, aún falta reconstruir el 75% de una ciudad que quedó casi en escombros. Incluso podría sonar a ironía, si se espera que ese terminal, en medio del desierto, se transforme en una alternativa concreta o un complemento al aeropuerto internacional Jorge Chávez, en una localidad en la que su municipalidad ni siquiera posee una sede fija, tras el terremoto.
Sin embargo, si uno suma las características que posee Pisco, o por lo menos las que se espera que tenga para fines del 2011, no parecería tan descabellado imaginar que estamos frente a un “hub” (eje) natural con proyección internacional. Un proyecto aeroportuario que podría impulsar la industria del turismo y la oferta agroexportadora al sur del país y quizá a precios muy competitivos.

UN “LOW COST” LOCAL
Para Carlos Gutiérrez, presidente de la Asociación de Empresas de Transporte Aéreo Internacional (AETAI), el Perú necesita urgentemente una alternativa al Jorge Chávez, que es administrado por Lima Airport Partners (LAP) desde el 2001, porque fenómenos climatológicos, como la neblina que se presentó en abril pasado, podrían suspender temporalmente la conectividad de Lima con el mundo.
Según Gutiérrez, el Perú necesita un terminal aéreo cerca de Lima, que permita el desembarque de pasajeros ante cualquier emergencia no solo atmosférica, como sucede en el de Ciudad Real, una alternativa al aeropuerto de Barajas, en Madrid. “Actualmente, si el Jorge Chávez se cierra, los pilotos aterrizan en Pisco, pero deben permanecer allí hasta que el aeropuerto de Lima se abra. Es una pérdida de tiempo”, agregó.
Para Gutiérrez se necesita además una infraestructura más eficiente, pequeña, con costos reducidos, en un lugar donde el clima permita aproximaciones todo el día, con miras a generar interés en el mercado de las aerolíneas “low cost”, que venden pasajes a precios más competitivos que el promedio del mercado debido a una estructura más eficiente en sus costos.
Por sus características, Pisco podría ser un aeropuerto “low cost”: posee una pista de concreto de 2,4 kilómetros, que le pertenecía a la FAP, en la que podrían aterrizar naves de más de 100 toneladas. Posee, además, un clima favorable que permite aprovechar más el uso del terminal. Asimismo, la carretera que se está construyendo entre Cerro Azul e Ica podría reducir el tiempo que se emplea para viajar por tierra de Lima a Pisco de 4 a 2 horas.

Coincidentemente, Air Comet, aerolínea de bajo costo de bandera española, ha mostrado su interés de operar rutas domésticas desde Pisco al resto del Perú. Según Tika Suárez, gerenta general en el Perú de la empresa, el proyecto de Air Comet Perú está congelado porque los costos del Jorge Chávez reducen las expectativas de utilidades para una “low cost”. Otras líneas de bajo costo que han mostrado su interés por desarrollar más rutas en el Perú son Sky Airlines (Chile), Ícaro Air (Ecuador) y Spirit Airlines (Estados Unidos).

EL “HUB” NATURAL
Desde febrero del 2008, Aeropuertos del Perú (ADP), que administra 12 terminales en el país, posee la concesión a 25 años del aeropuerto internacional de Pisco. Según Juan Mendoza, alcalde de dicha localidad, la empresa aún no pone ni una sola piedra en el terminal, a pesar de que esta se había comprometido con el Estado a invertir US$35 millones para su repotenciación.
Sin embargo, según Leonie Roca, gerenta general de ADP, el proyecto ha sido modificado con el objetivo de elevar su capacidad de tráfico. “Primero, se invertirán US$10 millones más; segundo, se han elaborado estudios de factibilidad para construir un aeropuerto más eficiente, de bajo costo, que no sea una salida de emergencia al Jorge Chávez, sino una alternativa más económica”. Para Roca, la inversión más importante, la pista de aterrizaje (en la que se habría tenido que invertir US$105 millones), ya está hecha.
Por otro lado, como lo señalaron Rómulo Trive-ño, presidente regional de Ica, así como Juan Mendoza, alcalde de Pisco, un aeropuerto en dicha localidad poseería como ventaja su cercanía con la infraestructura turística de Ica, encabezada por las líneas de Nasca, el tercer destino más visitado del Perú, después del Cusco (Machu Picchu) y Puno. Además, estaría cerca de la laguna de Huacachina, la bahía de Paracas, donde están las Islas Ballestas, además de hoteles de entre tres y cinco estrellas como el Doubletree by Hilton y próximamente Libertador, San Agustín, Aranwa y La Hacienda. Incluso, se podría sumar la visita casi obligatoria a las bodegas de pisco de la zona, oferta que se debería implementar.
Guillermo Álvarez, de la cadena hotelera Aranwa, que espera terminar de construir un hotel de cuatro estrellas en la bahía de Paracas con una inversión de US$8 millones, señala que sería importante contar con un aeropuerto más cercano para ofrecer mejores servicios a sus clientes. Actualmente, debido a la infraestructura hotelera en Paracas, empresas como Aerotransporte, Travel Air y Aerodiana, entre otras, están sobrevolando las líneas de Nasca vía Pisco, cuyo terminal está a 12 minutos de Paracas.
Respecto a la bebida de bandera, como nos comentó el ministro de Comercio Exterior y Turismo, Martín Pérez, se aprovecharía para poner el nombre de Pisco en los mapas del mundo. “Para el desarrollo del turismo se necesita más competencia a todo nivel. No solo hoteles, sino más aeropuertos. Desde Pisco se puede atender al turismo del sur con aviones pequeños a precios más bajos. Mientras haya más competencia, habrá mejores tarifas”.
Respecto a la agroindustria, Leonie Roca señaló que se podrían exportar uvas, flores frescas y espárragos de Ica, así como mariscos, que necesitan salir por aire, sin necesidad de llegar a Lima, descongestionando las carreteras de la capital, incluso despejando el tráfico aéreo del Jorge Chávez. Si Pro Inversión concesiona el Terminal Portuario General San Martín este año, como tenía previsto, a una inversión estimada de US$95 millones, podría configurarse un servicio de carga más eficiente para diversos sectores.
Según Roca, las tarifas podrían ser 40% más económicas, tanto para los turistas como para los operadores del aeropuerto.

MIRANDO AL 2012
En estos momentos, según nos informaron en el Ministerio de Transportes y Comunicaciones, así como en la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), se está validando el proyecto de ADP en Pisco, con miras a que se terminen los estudios de factibilidad e impacto ambiental para fines del 2009, para empezar a construir el terminal el 2010. La inversión será de US$45 millones, y será en forma de alianza público-privada, a ser reembolsada en 10 años.
Según Roca, en estos momentos también se está resolviendo el tema de la financiación, para la que señala que ya se han contactado con diversas entidades financieras. La construcción podría finalizar el 2012, para cuando la carretera que une Lima y Pisco esté terminada, y quizá se hayan empezado las obras del puerto.
Toda una ironía entre el presente y el futuro de una ciudad que se reconstruye con una lentitud indolente. Sin embargo, si este proyecto se concreta, Pisco podría resucitar, gracias al desarrollo que genera el turismo, una industria que más de una vez ha demostrado producir un impacto positivo alrededor de un destino.

PUNTO DE VISTA
Ahorro de tiempo *Es necesario contar con un aeropuerto alternativo para eventuales situaciones. Ya hemos tenido problemas de clima y congestión de vuelos, que han demandado que los aviones sean derivados a Chiclayo y a Pisco. Incluso, en este ultimo destino, ni siquiera se podía bajar del avión por no contar con una infraestructura mínima.
Creemos que hay un grupo de pasajeros que probablemente preferiría obviar el paso por Lima. Desde que un turista llega al Perú tiene que trajinar desde su arribo al Jorge Chávez hasta su llegada al Cusco. Este aeropuerto representaría menos pérdida de tiempo para los turistas
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COMENTARIO:

Por supuesto como van a construir un aeropuerto internacional en pisco, si pisco fue la ciudad más dañada por el terremoto del 15 de agosto del 2007, y aun faltando construir la gran mayoría de pisco que quedo en escombros.
Pero pensándolo bien pisco posee lugares turísticos muy atractivos y seria un eje natural con proyección internacional estos legares.
Al igual que Carlos Gutiérrez una alternativa al Jorge chaves daría este aeropuerto, por que se necesita descentralizar lima ,también por los fenómenos climatológicos, como la neblina producida en abril pasado que suspendieron temporalmente la conectividad de Lima con el resto del mundo , así como estos problemas podrían presentarse muchas veces.
Además pisco de poseer una pista de concreto de 2.4km en la que podrían aterrizar naves de más de 100 toneladas, posee un clima favorable que permita aprovechar mas su uso, además de la carretera que están construyendo entre el Cerro Azul e Ica reduciría el tiempo que se emplea en viajar a esta ciudad, y no solo eso, también ayudaría esta carretera a un intercambio más fluido de mercaderías entre estas dos ciudades.
Respecto a la agroindustria es razonable pensar que con la creación de este aeropuerto se podrá descongestionar el Jorge chaves debido a que hay productos que se exportan por aire, y que ahora se darían desde Pisco.
Y con esto Pisco se reconstruiría, gracias al desarrollo que genera el turismo, una industria que ha demostrado producir un impacto positivo alrededor de un destino.

viernes, 4 de septiembre de 2009

comentario al articulo ¨Naturaleza trabajando¨

Es que el problema no radica en que la gente no quiera que exploten su recurso o que creen hospitales en sus ciudades o población, sino que a través de varios años el estado a concesionado terrenos en diferentes lugares del nuestro país para explotar sus recursos naturales; las cuales las empresas han contaminado los ríos, tierras de cultivo en esos lugares, y la población se dio cuenta de la poca ineficiencia del estado por sancionar y corregir este problema
Por lo cual conlleva a que ceder mas territorios como áreas protegidas, santuarios nacionales , parques a las empresas que quieran explotar estos recursos con este sistema de control que tiene el estado, nos estaría conllevando a tener más lugares contaminados en nuestro país y también a la extinción de especies únicas de flora y fauna de estos lugares.

Un ejemplo claro de que el estado no controla estas empresas es el caso de ´´LA OROYA´´, ciudad que ocupa el segundo lugar en ser la ciudad más contaminada del mundo, que se debe básicamente a los relaves producidos por la refinería de metales ´´DOE RUN PERU´´ y este caso tal vez no sea el único en el país pues es justamente qué estado se hace loco debido a que el canon que recibe por parte de estas empresas el estado, ocupa el segundo ingreso de su presupuesto nacional.